Formato RAE
Información general
Tipo de documento Cartilla de cuentos
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Titulo del documento Un Río de Cuentos
Autor (es) Niños del Centro Educativo Comunitario Intercultural Bilingüe de Juan Tama
Publicación Programa de Educación Bilingüe e Intercultural – Centro de Documentación José María Ulcué
Unidad patrocinante CRIC – PEBI
Ciudad y año Popayán, 2006
Palabras claves Cuentos, creatividad, narraciones propias, niños, niñas, cultura, territorio
Descripción
Este libro presenta algunos cuentos desarrollados por los niños del Centro Educativo Comunitario Intercultural bilingüe de Juan Tama. Tiene como objetivo contar a los niños de toda Colombia sobre la cultura del pueblo Nasa, su contexto y su lengua, el nasa yuwe.
Fuentes
Cada cuento es redactado por los niños y niñas del Centro Educativo Comunitario Intercultural Bilingüe de Juan Tama
Contenidos
Estos son los cuentos de la cartilla:

La Luna: ella se encontraba triste porque no tenía con quién jugar; se fue a otra parte y se encontró con las estrellas. Jugaron a escondidas y esa fue la noche más hermosa. Cuando amaneció, la Luna se fue bailando muy feliz.

Rosita la ardilla comelona: una ardilla andaba triste ya que no encontraba comida. Caminó por un buen tiempo, cuando de pronto vio un rosal de maíz. Comió hasta quedar como un tambor y guardó para llevar a su casa. Cuando se le acabó el alimento volvió; había alguien ahí, era un hombre que decía: «¡Tenderé una trampa al comelón!». Rosita la ardilla volvió al otro día, comió de las mazorcas más grandes y se llenó. Decidió regresar después, pero una cuerda rodeó su cuello, causándole la muerte. El dueño del maizal la llevó a su casa y la preparó con mote de choclo; la familia comió y disfrutó. Actualmente, su piel está colgada en la pared.

El agua: un niño iba en busca de agua y se encontró con un lobo. El niño se asustó, mientras el lobo le decía que fueran amigos y se fueran a bañar. Cuando llegaron, el lobo tuvo miedo porque el río estaba crecido. El niño se bañó mientras el lobo dormía. Después de una largo rato, el niño cansado salió del agua. «Despierta», le decía al lobo en su oreja; el lobo de un salto abrazó al niño, para después ir a jugar con las ranas y el armadillo.

La historia del león: el león se fue a la montaña y se encontró con el tigre. El león preguntó: «¿Qué haces por aquí?», a lo que el tigre respondió: «Estoy buscando un niño que pasó por aquí, y se puede perder en esta montaña». Se fueron corriendo y alcanzaron al niño; este se puso a gritar. Lo tranquilizaron y lo llevaron a su casa para que se reencontrara con sus hermanos.

El pájaro: el pájaro va a la montaña a buscar alimento; come pepas del bosque. Después de comer va a su casa a dormir, hasta que el hambre lo obliga a buscar de nuevo.

El zorro de la montaña: en las montañas de Juan Tama vivía un zorro melenudo con un gusto muy exquisito: comía gallinas ponedoras. Esperaba que las gallinas pusieran sus huevos, saltaba sobre ellas, las correteaba y se las comía. Las gallinas decidieron poner sus huevos en horas de la tarde, pero el lobo astuto madrugó al día siguiente y se los comió. Las gallinas le contaron al dueño y este decidió matarlo; le disparó, pero el zorro se estaba riendo. La segunda vez que disparó, el zorro se murió del susto.

El perro Toño: se fue a la montaña y se encontró con un oso. Se hicieron amigos; jugaron y rieron hasta que tuvieron hambre y se preguntaron qué comerían. Bajaron al potrero y encontraron una vaca; el perro se sorprendió dado que es un animal muy grande. El oso dijo: «Yo la mataré» (y lo hizo). Comieron hasta aburrirse; casi no podían caminar. El dueño de Toño lo encontró y se lo llevó a su casa; el oso se sintió muy triste, lloró, sabía que no podía visitarlo porque el oso es un animal salvaje y el perro un animal doméstico.

El Sol y el viento: un día, el viento preguntó al Sol: «¿Quién es el más fuerte?» El sol respondió: «¡Yo!, porque hago crecer las plantas y no las tumbo». El viento dijo: «¡Qué presumido eres! Yo también soy fuerte; voy a elevar a ese hombre», pero no lo logró y el Sol ganó.

El tigre y el oso: el tigre, felino y feroz, siempre encontraba a alguien y lo mataba. Un día se encontró al oso, que le dijo: «Eres aprovechado con otros. Por esto, decidió desafiarlo y lo retó a matarlo a él también. Los dos animales parecían no amar la vida; rodaron por el monte, después se cansaron y terminaron la pelea. Se dieron cuenta que pelear no era bueno, y desde ese día tigre y oso son grandes amigos.

La montaña amiga de las mariposas: en la vereda existía una mariposa andariega de mil colores. Fue a buscar comida, no encontró nada y se durmió en un árbol. Salió nuevamente y se encontró con un mosquito que le dijo: «Hermosa mariposa, ¿qué haces tan sola?». El mosquito la llevó a su casa y le ofreció comida. Ella luego lo invitó a la montaña, donde el mosquito se perdió. La mariposa estuvo muy triste, pero el mosquito regresó. Ella lo llevó a su casa y allí vivieron juntos y felices.

El Sol que da vida: dicen los abuelos que el Sol se viste de oro todos los días. Él es nuestro padre, nuestro dios, nos calienta y nos abraza. La tierra es su primera mujer, que produce muchos hijos como son los alimentos, los árboles, los animales y los humanos. Los Nasa somos hijos del agua, del Sol, las estrellas y la tierra.

Capotillo: Beatriz salió al bosque a buscar leña; allí vivía un mosco llamado Capotillo. De pronto, Beatriz sintió que algo le picaba la pierna y chupaba su sangre. Ella corrió a su casa, mientras Capotillo la siguió y quiso también chupar la sangre de la señora. Beatriz, furiosa, lo aplastó y fue a curarse la picadura.

El cazador: el cazador caminaba por el bosque con sus perros; encontraron un venado y los perros empezaron la cacería. El venado llegó hasta el río Moras; los perros sintieron miedo de cruzar el río. Pasaron el puente y encontraron un tigre que los atacó; el cazador tomó su rifle, apuntó al animal y lo mató. Luego lo peló y lo despresaron para llevarlo a casa, donde compartió con sus amigos.

El conejo: don Antonio ponía trampas al conejo Ramón. Este, confiado se dirigió a la casa en busca de alimento; allí cayó en la trampa. Don Ramón lo mantuvo encerrado hasta cuando sintió ganas de comerlo, lo preparó y se fue a invitar a sus amigos. Cuando volvió, no había conejo, ni alimentos. Un perro hambriento entró y se comió todo. Don Ramón dijo: “Nadie sabe para quién trabaja”.

La historia del ovejo: los ovejos vivían en un potrero con sus amigos; eran muy bravos. Una mujer fue a darles comida pero seguían bravos. Con el tiempo, estaban peludos y se acercaron a las personas; las señoras llevaban a sus hijos a jugar con los ovejos.

La historia del caballo: el caballo comía en el potrero; su dueño lo montó y fue a la montaña. Cuando llegó a su casa en la tarde, su esposa no había hecho la cena; el hombre se enojó y la golpeó y se fue. Cuando regresó, no la encontró; se fue, la buscó y regresaron juntos.

El cuento del oso negro: el oso come bananos y el dueño de estos frutos se acercó sin hacer ruido El oso dio un rugido tan fuerte, que asustó al hombre y este se fue a dormir. Al otro día fue armado y mató al oso. Después, un oso más grande tomó venganza y mató al hombre.

El marrano de las arracachas: el cuento habla sobre un marrano desobediente y su dueño; este  crea una estrategia para que el cerdo le obedezca. A pesar de todos los intentos, no lo logra.

La cuya que buscaba compañía: cuenta un hombre que tenía una cuya en una jaula. Un día no la encontró y aunque la buscó, no lo halló. Al día siguiente la encontró en la jaula con el cuy.

El mico solitario: hay un mico solo y triste que busca la compañía con una mariposa. Le pide que viva con él; la mariposa le dice no y le regala miel. Luego, el mico encuentra a un mico triste y se hacen amigos. Este, le da miel de en un árbol de Tierradentro.

Recomendaciones
Es importante que tanto las Instituciones Educativas como la comunidad en general, incentiven a los niños y niñas a leer todo tipo de relatos. Así mismo promover la creatividad, para plasmarla en las historias, cuentos y dibujos que ellos quieran. Todos los niños y niñas tienen derecho a leer y escribir cuentos, no dejemos los libros guardados en la biblioteca.

 

Elaborado por: Equipo de Investigación de la Fundación Transformemos
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