El documento describe la manera en que el colombiano se ha apropiado culturalmente de los indígenas, dado que ha buscado siempre tomar la causa de liberación de los indígenas como propia, pero sin tener en cuenta las peticiones que estas comunidades han generado durante siglos.
Explica las migraciones de los seres humanos desde Asia hacia el continente americano, generando y promoviendo un proceso intercultural y dejando un importante legado cultural. Esto contradice la teoría de los colonizadores españoles en relación con la escasa población que encontraron cuando llegaron al continente americano. Esta gran diversidad se vio diezmada por la muerte de miles de indígenas a causa de las enfermedades traídas por los europeos, así como por los trabajos forzados a los que se vieron sometidos. «El hecho es que en menos de 100 años su número se había reducido a una fracción. Pasarían siglos antes de que el territorio que hoy es Colombia se recuperara de ese desastre. Quizá solo a principios del siglo XX alcanzó el nivel de población que existía a comienzos del XVI. El mismo proceso disminuyó la diversidad biológica y cultural de la población. Algunas comunidades se extinguieron, otras se mezclaron entre sí y, en casi todas, el nivel de vida se redujo considerablemente». Para los procesos sociales, políticos y culturales de estas comunidades, su transformación fue irreversible después de la colonización. En la actualidad, aún corren peligro por el conflicto armado que vive el país, y aunque «muchas comunidades han recuperado durante los últimos años cantidades considerables de tierra y tienen niveles de vida por encima de sus vecinos mestizos y afrocolombianos. Otras pierden cada vez más sus medios de subsistencia. Sobre el papel, cerca del 31 por ciento del territorio nacional es indígena, pero buena parte de esa tierra se concentra en áreas protegidas y son de gran susceptibilidad al cambio ambiental. Además buena parte de esas tierras son amenazadas permanentemente por la violencia de los grupos ilegales, incluyendo paramilitares y guerrilla, por el cultivo de plantas con las cuales se obtienen drogas ilícitas, o por la minería ilegal.» |